Los parques y jardines botanicos en primavera parecen salidos de un cuento. Tulipanes, narcisos, lirios y cerezos en flor decoran cada rincón. Algunos lugares imperdibles para disfrutar esto:

• Jardín Botánico de Múnich o Berlín

• Herrenhäuser Gärten en Hannover

• Luisenpark en Mannheim

• Palmengarten en Frankfurt (y en este articulo te cuento sobre 9 parques más en esta ciudad)

Incluso en ciudades pequeñas vas a encontrar parques con árboles en flor. Solo salí a caminar, llevate un mate o un café, y disfrutá.

Con el clima más amable (promedios de 10°C a 20°C), es momento de desempolvar la bici. Los alemanes aman el aire libre y hay rutas marcadas por todos lados. Algunas favoritas:

• La Selva Negra (Schwarzwald) – ideal para senderismo con vistas increíbles.

• El Rin en bicicleta – seguí el río y descubrí pueblitos, viñedos y castillos.

• Lagos bávaros – como el Tegernsee o Chiemsee.

¿No tenés bicicleta? Podés alquilar fácilmente en cualquier ciudad, incluso por apps como Nextbike o Lime.

Mayo es temporada alta de eventos. Todo el país se llena de:

• Festivales de primavera (Frühlingsfeste) con juegos mecánicos, música y cerveza.

• Mercados gastronómicos, donde podés probar de todo, desde currywurst hasta platos internacionales.

• Festivales de vino (Weinfeste) en regiones como Rheinland-Pfalz o Baden-Württemberg. Si sos team vinito, esta es tu época.

Chequeá el calendario local de tu ciudad: seguro hay algo cerca.

No podés vivir una primavera alemana sin pasar por un Biergarten. Es una tradición súper local y una de las mejores formas de disfrutar el buen clima. Vas, pedís una Weißbier bien fría, una Radler (¡una de mis favoritas!) o incluso una sin alcohol —también hay—, acompañás con un pretzel o una salchicha, y te sentás bajo los árboles a charlar con amigos... o simplemente a mirar la vida pasar.

Algunos clásicos:

• Hirschgarten en Múnich – el Biergarten más grande del mundo 🌳

• Pratergarten en Berlín – el más antiguo de la ciudad, con mucho ambiente

• Cualquier Biergarten local – no tiene que ser famoso para ser lindo, cada uno tiene su propio encanto

La primavera es ideal para pequeñas escapadas. Algunas ideas:

• Rothenburg ob der Tauber – un pueblito medieval que parece de película.

• Heidelberg – castillo, río y montaña en una sola ciudad.

• Mosela y el Valle del Rin – viñedos, ríos y castillos: un clásico romántico.

Los trenes regionales (especialmente con el Deutschlandticket de 58€) te permiten viajar barato.

No hace falta hacer grandes planes. A veces, lo mejor de la primavera es simplemente:

• Tomar un café en una terraza.

• Ir a un picnic al parque.

• Leer un libro bajo el sol.

• Caminar sin rumbo solo por el gusto de sentir el sol en la cara.

• Disfrutar la naturaleza, la tranquilidad, los pajaritos...

Después de tantos meses de oscuridad, eso ya es suficiente.